Si estás planeando unas vacaciones en Córcega, ten en cuenta que el periodo mínimo para permanecer en esta inmensa isla es de una semana. Si consigues dedicar diez días o más a tu viaje, tendrás la oportunidad de visitar los lugares más emblemáticos y hacerte una pequeña idea de la “Córcega secreta”, menos turística. Entre mar, montaña y pueblos pintorescos, podrás sumergirte en el auténtico corazón de la isla y saborear los aspectos que enamoran a tantos viajeros de todo el mundo.
Pero, ¿cómo moverse por Córcega? Para vivir una experiencia completa, te recomendamos que viajes en coche, debido a las largas distancias.
¿Qué ver en Córcega en una semana? Tu itinerario puede comenzar en Bastia, a la que puedes llegar en avión, pero también en ferry. Puedes consultar a través de nuestro comparador en línea las salidas disponibles hasta el puerto de Bastia, las ofertas y la forma de embarcar tu vehículo.
Desde el puerto, podrás visitar el corazón de la ciudad, desde la plaza de San Nicolás hasta la iglesia de San Juan Bautista. Después del primer día, podrás conducir por los pueblos de esta aldea al norte de Bastia hasta las pintorescas localidades de Île-Rousse y Saint Florent. Desde aquí podrás adentrarte en el Desierto de Agriates, una escarpada zona montañosa que podrás visitar en una excursión organizada.
La ciudad de Calvi es en sí misma un maravilloso mirador sobre el Parque Natural de Scandola. Visita los Calanchi della Piana, extrañas formaciones rocosas que parecen obras de arte.
El viaje continúa hacia la capital, Ajaccio, y los lugares dedicados a Napoleón Bonaparte: su casa natal y su museo. Continúa por los encantadores pueblos de Propriano y Sartene hasta el famoso yacimiento arqueológico de Filitosa, con sus menhires prehistóricos. En el extremo sur se encuentran las localidades de Bonifacio y Porto Vecchio, donde se sitúan las playas más hermosas de Córcega: Rondinara, Palombaggia y Santa Giulia. No te pierdas una excursión en barco a las Bocche di Bonifacio y al archipiélago de Lavezzi.
En este punto, si te quedan al menos dos o tres días, puedes optar por subir hacia el norte y llegar a Corte. Deje atrás el mar y llegue a este encantador pueblo de montaña con sus singulares rutas de senderismo y, a poca distancia, las Gorges de la Restonica del Parque Natural Regional de Haute-Corse. Merecen una excursión: admirarás un paisaje dominado por la naturaleza. A pocos kilómetros, no te pierdas el maravilloso Valle de Tavignano, con sus gorges y su floreciente belleza bañada por las aguas del río del mismo nombre.
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sylviacopol0, Pixabay
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